Suggestive Boy se llevó la gloria del Jockey Club

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16.10.2011

El destino juega mucha veces papeles secundarios en las cosas de la vida. Pero en otros momentos cobra una relevancia que quizás es hasta injusta por lo grande. Y algo de eso fue lo que ocurrió anteayer en San?Isidro, donde la hípica argentina volvió a latir fuerte de la mano del Gran Premio Jockey Club (G1-2000 m, césped), la carrera más antigua del calendario nacional. Por un lado, la catarata de aplausos cayó del lado de Suggestive Boy, el potrillo del Haras Pozo de Luna que ganó su cuarto grupo uno de la temporada y ratificó su condición como líder indiscutido en la grama. Por el otro, estuvo la desafortunada tarde de Chuck Berry, al que se le cortó una rienda a poco de partir, llevándose la mayor parte de sus posibilidades y librando su actuación en mucho a la suerte. Este último concepto no desmerece en absoluto la fantástica actuación del hijo de Easing Along, pero si intenta establecer que la historia, quizás, pudo haber sido diferente. Suggestive Boy fue un ganador tremendo, subrepticio, que dio pautas de ser dueño de una categoría superior. Chuck Berry fue un escolta dignísimo, que terminó envuelto en bronca y que, a pesar de todo, luchó hasta el final por conservar las posibilidades de seguir corriendo por la Triple Corona, esa a la que aspiraba tras ganar en septiembre el Gran?Premio Polla de Potrillos (G1) de Palermo. Hacía mucho tiempo que una carrera de la envergadura del Jockey?Club no estaba tan cerrada a un par de nombres. Y en la pista todas las suposiciones encontraron un correlato perfecto. Suggestive Boy volvió a voltear un muñeco de los importantes; como lo había hecho en el Chevalier (G1) con Cartier Gold?(Orpen), o como ocurrió también en las Estrellas (G1) con el exportado Escape of Glory (Lode). Cuando hay que dar guerra, el zaino que brillantemente lleva Alfredo Gaitán?Dassié (G1) desde el entrenamiento, levantas las armas primero que nadie. Su cambio de velocidad marcó pautas en la recta final, luego de dejar por los 500 metros ese incómodo lugar junto a los palos por el que se movió, posición que amenazó con complicarlo al abandonar la última curva. Cuando?Eduardo?Ortega Pavón lo puso a correr, fue una aplanadora. Chuck Berry, su gran rival desde el día de las anotaciones, mostró tanta clase como guapeza su jockey, Jorge Ruíz Díaz. Llamó la atención verlo correr tan cerca desde el comienzo, cuando todos aguardaban se moviera a la expectativa para explotar al máximo su atropellada. Luego, conocido el evento de la rienda, todo estaba explicado. Valiente y testarudo, Ruíz Díaz hizo lo que pudo en la silla del hijo de Grand Reward; o, mejor dicho, quedó librado a lo que el potrillo quisiera hacer. Como bien se encargó de explicar el propio jockey luego, en medio de las lágrimas de bronca:?“Parecía que me dijo: quedáte tranquilo, yo te llevo al disco”. Pero no pudo hacer. La clase de Chuck Berry, sin la posibilidad de ser regulada, no alcanzó para frenar a Suggestive Boy, que finalmente terminó ganándole por 2 1/2 cuerpos y al cabo de un registro estupendo y que habla a las claras de lo fuerte que se corrió: 1m58s14/100. Tercero, a largo y medio del escolta, llegó Video Game (Orpen), un reservado de La Providencia que venía de salir de perdedor y que mostró calidad como para no perderlo de vista de aquí en más. Queda ahora la posibilidad de una revancha entre vencedor y vencido. Hay una leve oportunidad de que se de en el Nacional?(G1) de Palermo, aunque es más que probable que llegue la tarde del Carlos Pellegrini (G1), pues se duda que Suggestive Boy abandone su terruño preferido para desafiar a Chuck Berry en la arena que tan bien le sienta. El Gran?Premio Jockey Club 2010 ofreció una carrera con matices, que fue desde el vértigo a los lamentos. Pero que, principalmente, dejó en claro que la generación nacida en 2008 tiene a dos referentes de lujo en Suggestive Boy y Chuck Berry. Mientras una parte festeja y la otra clama revancha, para todos nosotros, los amantes de la hípica, será cuestión de esperar para volver a verlos frente a frente en una pista de carreras y enterarnos de qué sucederá sin que el destino meta la cola. Diego H. Mitagstein

EL RESULTADO Gran Premio Jockey Club (G1); San Isidro, Buenos Aires, Argentina, 15 de octubre de 2011. Productos nacidos desde el 1° de julio de 2008. Pista de césped normal, 2000 metros. US$ 109.669. 1° SUGGESTIVE BOY (Arg), m., z., 3, 56 kg., Easing Along (USA) – Suffrage (USA), por Horse Chesnut (Saf); Caballeriza, Pozo de Luna; Criador, Haras Futuro S.R.L.; Entrenador, Alfredo Gaitán Dassié; Jockey, Eduardo Ortega Pavón. 2° Chuck Berry (Arg), m., z., 3, 56, Grand Reward (USA) – Wild Berry (Arg), por Southern Halo (USA); Caballeriza, John Fulton; Criador, Haras La Quebrada; Entrenador, Roberto Bullrich; Jockey, Jorge Ruiz Díaz. 3° Video Game (Arg), m., z., 3, 56, Orpen (USA) – Vitaminada (Arg), por Roy (USA); Caballeriza, La Providencia; Criador, Haras La Providencia; Entrenador, José M. Alves; Jockey, Altair Domingos. Márgenes: 2 ½, 1 ½, ¾. Tiempo: 1m58s14/100. Después llegaron: Don Platense (Arg) 56, Flying Floo (Uru) 56, Don Lancero (Arg) 56, Pricker (Arg) 56, Fantastic Royale (Arg) 56, Anual Winner (Arg) 56, Perversado (Arg) 56, El Oso (Arg) 56, Calipsus (Arg) 56, Calvados (Arg) 56, Emperador Juan (Arg) 56 y Incurable Talk (Arg) 56. 15 participantes. Corrieron todos los inscriptos.




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