American Pharoah directo a los libros de historia

01.11.2015

No tuvo rivales, ganó como quiso, ganó como lo que es, un crack de esos que nacen cada mucho tiempo, se despidió a lo grande dejando asombrados a los presentes en Keeneland y a todo el mundo.

El hijo de Pioneering of The Nile logró el primer Grand Slam en la historia del turf norteamericano. La Breeders Cup se corre desde 1984 y el último ganador de la Triple Corona había sido en 1978, por lo tanto American Pharoah era el primero que tenía la chance de lograr un hecho inédito, y lo logró.

Y lo hizo de la forma en que debía hacerlo, ganando por varios cuerpos y con total comodidad. Dominó la carrera desde el inicio y no hubo historia, como largó llegó y al pisar la recta ya se lo podía aplaudir. Lo escoltó a 6 cuerpos y medio Effinex que fue quien lo siguió durante toda la carrera, fue tercero en larga carga Honor Code. Como siempre su jockey fue el mexicano Víctor Espinoza.

El caballo que es propiedad de Ahmed Zayat conquistó su noveno triunfo en 11 salidas a pistas en las que totalizó 8.65 millones de dólares en premios. Demoró 2.00.07 para cubrir la milla y cuarto (2000 metros) en record para la pista en Keeneland, un hipódromo chico para los canones norteamericanos y que rebosaba de público ávido de ver y rendir pleitesía a este ídolo de cuatro patas.

Fue la última salida a pistas de un caballo que escribió historia grande y que quedará por siempre en el altar de los burreros.

Germán Boiso.