Están naciendo los futuros campeones (La Nación)

Seviven tiempos agitados en los haras. Están a full de trabajo en las cabañas. Y no sólo las de Argentina, donde las yeguas madres han comenzado a parir los futuros campeones de las pistas. Aquí nacerán cerca de ocho mil. La misma rutina ocurre en los otros países del hemisferio sur. La temporada de alumbramientos arrancó en julio y tienen tiempo de hacerlo hasta diciembre próximo. A la par, los padrillos hacen lo suyo. En Firmamento, el otro día nació una hija de Miss Pinky; segunda cría de la ganadora de la Copa de Plata; Juan Carlos Bagó le puso Pinky Nistel por nombre. En El Mallín habían nacido esta semana ocho hembras y dos machos y su nuevo semental, Fragotero, debutó sirviendo. En El Paraíso, Tanganika, ganadora de Grupo 1, tuvo cría hembra por Angiolo. En la cabaña del matrimonio de Pablo y Victoria Duggan invitan al público a ayudar buscando nombres. Son apenas tres ejemplos entre miles .Y en un par de años, muchos tendrán nuevos dueños. Yearlings se están vendiendo desde ayer en Arqana, la organización que subasta SPC en Deauville. El primer hijo del campeón Frankel en rematarse hizo 300.000 euros; hoy se venderá una propia hermana de Treve, ganadora de dos Arco de Triunfo, en París. Es el lote 176 entre más de 350 productos que desfilarán por el ring. Puede marcar un record la hija de Trevise, la yegua madre que en 2008 tuvo una cria por Numerous que luego fue presentada a Hurricane Cat. El mundo es chico. Numerous dejó huella en Firmamento y Hurricane Cat está de nuevo en El Mallín Ya que hablamos de Francia, hay que decir que un caballo del conde Andre de Ganay ganó esta semana el Prix de Moulins, sobre 2400 metros de césped en el hipódromo que le da nombre a la prueba. El hipódromo regional diagrama carreras planas, de trote y de obstáculos, y el conde acá es dueño de Los Cerrillos. Francia importa carreras de Sudamérica para presentárselas a sus jugadores con tan buen suceso que el volumen de juego aumentó un 7,6 por ciento en la temporada pasada. Otro tema. Anteayer el potrillo Nashville Texan triunfó en el clásico Remigio González Moreno con los colores del stud Sta.Elena, propiedad de Mónica López y Alberto Roberti, quienes tienen caballeriza en San Isidro y palco en Palermo. Roberti, tercero en la lista de diputados por el masismo y para quien los peronistas de ese sector no van a juntarse con el Pro ni ahora ni después, venía de ver perder a Le Blues en el Argentino, el lunes pasado, siendo el principal favorito. Felipe Solá, candidato a gobernador por el Frente Renovador, visitó LA NACION para el ciclo Conversaciones al mismo tiempo en que Nashville Texan ganaba en San Isidro. Cuando se iba, Solá pispeó el replay de la carrera desde un televisor en la Redacción y confesó a este cronista que en sus tiempos jóvenes participó en cuadreras, junto con su hermano, siendo bastante rápido en las largadas. Solá supo tener un buen caballo que emigró a los Estados Unidos; le cuidaba Julio Penna y consideró a Reviriego entre los buenos trainers. La mala noticia de la semana fue que el ganador de las Dos Mil Guineas habría dado positivo en el antidoping. De confirmarse, será distanciado del primer puesto para amargura de Hernán Muriale, un ex intendente de Pinamar que se sacó la foto en San Isidro con el potrillo.