Ya pueden celebrar
Insistencia. Perseverancia. No darse por vencido. De tanto golpear puertas y a veces llorar miseria, las entidades del turf lograron que se descongele la subvención con que la provincia asiste a la industria. Por ejemplo, se dice que los 14 millones por mes que recibía San Isidro se convertirán ya en 19, fundamentalmente para reforzar los premios de sus carreras. Habrá motivos, pues, para que el sector hípico celebre fin de año. "La carrera para perdedores en la milla que en San Isidro se está corriendo por $ 59.000 podrá ascender a 75.000 gracias al descongelamiento del fondo de reparación y a una nueva manera de distribuir esos ingresos", contaba el sábado Eduardo Ferro, de la gremial de jockeys y cuidadores. El nuevo reparto implica menos porcentaje para que el hipódromo pueda utilizarlo en infraestructura y desarrollos comerciales y más dinero para bolsas de premios. "Hubo gastos que no se vieron reflejados en obras y eso abrió la puerta para que se pidiera a la Lotería un cambio en la manera de distrubuir la plata del fondo", explicó el dirigente . El hipódromo del Bosque, con empleados cuyos salarios son pagos por la provincia, también tendrá su plus para solventar las carreras. Tandil y Azul seguirán entre los beneficiarios, a los que se les suman los criadores, un gremio relacionado al juego de azar y otro de trabajadores estatales, que también pidieron ser incluidos entre los que reciben subsidios y están vinculados directa o indirectamente con el deporte de los reyes.